ENSEÑANDO A TUS HIJOS A ORGANIZAR JUGANDO
La organización y el orden son valores que nos facilitan la vida, muchísimo, en casa, en la escuela, en el trabajo... con nuestras emociones! En la niñez es mucho más fácil cultivar cualquier valor y fomentar un hábito sólido y saludable para el resto de nuestra vida. Como padres, nuestro rol es darle las herramientas necesarias para que el desarrollo de nuestros hijos sea el más completo posible, por eso, es fundamental ayudarles a entender desde temprana edad sobre el cuidado y orden de sus cosas: ropa, juguetes, materiales escolares, entre otros.
Ahora, veamos el cómo por edades.
0-3 años:
En estas edades, los niños suelen percibir muy bien el orden, están muy atentos de todo lo que hacemos y sucede a nuestro alrededor. Una secuencia de formas, colores, tamaños capta su atención fácilmente; por eso son tan sensibles al orden, lo disfrutan se podría decir, y cuando están en presencia de él, les causa una sensación de estabilidad y control.
¿Qué hacer en esta etapa?
En esta edad es clave que el orden y la organización se le presente a través de juegos divertidos, donde ellos ordenen por formas, por colores, por tamaños, por tipos de juguetes. Puede empezarse con juegos didácticos que fomenten la práctica de asignarle un lugar a las cosas; es decir donde ellos puedan aprender la idea de organizar de forma visual, reunir grupos de juguetes que pertenezcan a una categoría (Animales con animales, partes del cuerpo, objetos de casa) y ya luego, pedirles que ordenen por colores o por tamaños esas categorías.
3-7 años:
A partir de los 3 años, si ya interiorizaron las experiencias descritas anteriormente será mucho más fácil ya que respondan rápidamente al orden pues lo perciben como parte de su rutina; al menos para jugar. En esta etapa, es importante empezar a incluir en los juegos con nuevas variantes a ordenar y categorizar, como: su ropa, materiales escolares y distribución de las cosas en casa. Aquí el padre debe guiarlo y ayudarlo a través de elementos sensoriales un
poco sobre sus responsabilidades, en esta edad, la imitación es tu arma más poderosa.
¿Qué hacer?
- Inicialmente, incluir los nuevos elementos para ordenar y categorizar.
- Establecer de forma clara cuál es el lugar de cada cosa en casa, siempre delimitando su alcance: es decir cuáles se deben o no tocar; y enfatizando en que una vez utilizadas debe regresarlas a su lugar de origen. Dar nombres lúdicos a cada región: el rincón de los sueños, por ejemplo.
- Invitarle de forma amable y divertida a participar en pequeñas tareas de organización del hogar que estén relacionadas a él: doblar su ropa, guardarla, guardar la ropa sucia, colocar un envase en la basura, alimentar a la mascota, guardar los juguetes y así.
- Establecer rutinas: horarios, higiene y aseo personal, horas de comidas, descanso y juegos. Las rutinas les ayudan muchísimo con el orden interno. Es IMPORTANTE a estas edades manejar un sistema de motivación y recompensa ante estos hábitos, más que un sistema de regaños por incumplimiento e ir reforzando su seguridad ante la toma de decisiones.
Sugerencias:
- Juegos didácticos de categorización y secuencia.
- Juegos donde se muestre un sistema de recompensas.
- Historias o cuentos donde los protagonistas se ven beneficiados por ser ordenados.
- Mostrar las tareas del hogar donde se incluyan como algo divertido, donde compartan risas y palabras motivadoras.
7- Pre adolescencia
En esta etapa ya el concepto de Ordenar, Organizar y Limpiar está bastante asimilado. Y se ha incluido un valor muy importante: responsabilidad. Debe concebirse como un miembro activo de la casa, y según su edad y capacidades, puede colaborar activamente en las tareas de mantenimiento del hogar. Ejemplo: ayudar a ordenar su habitación, ordenar y limpiar sus libros, clasificar y almacenar su ropa; o asistir a los padres en otras tareas que ellos crean relevantes.
No se debe cargar la responsabilidad completa de las tareas del hogar pero tampoco debe excluirse su participación de ellas, pues le estarás dando herramientas a utilizar para el resto de su vida.
¿Qué hacer?
- Empieza por asignarle cosas fáciles, algo que ya sepas que le guste. (sin hacerlas ver como tal ante ellos)
- Asigna tareas concretas, en vez de pedirle que organice un área, pídele que lo haga con una categoría.
- NO asignes tareas según el sexo, jamás!
- NO vendas la idea como algo negativo: un castigo, un regaño, una deuda.
- Enséñale tantas veces sea necesario señalando los beneficios y cuán agradecidos están ante su ayuda.
Sugerencias
- Mantener el sistema de recompensas o incentivos.
- Realizar actividades al ritmo del baile o disfrutando la música que más le guste.
- Reforzar sus rutinas a través de planificadores familiares.
Rol de los Padres
- Ser ejemplo: no podemos mostrarnos apáticos y renuentes a las tareas de organización, orden y limpieza; pues de esta manera ellos lo van a percibir.
- Establecer metas: desarrollar sistemas en base a logros o consecución de pequeños objetivos; eso les enseñará mucho a nivel de productividad y organización personal. Las metas deben ser realistas y logrables, en base a la edad y habilidades notadas en el niño.
- Reconocer el esfuerzo y el trabajo: SIEMPRE utilizar un lenguaje positivo, venderlo como lo que es, una gran herramienta para ellos con muchos beneficios. Se debe felicitar, motivar e influir positivamente en cada etapa. Esto nos lleva al cuarto punto.
- Tener paciencia: no comparar el proceso del niño con ningún otro, asimismo, aceptar y enseñar con amor cuando cometan errores o por olvido, pasen por alto alguna actividad. Nunca utilizar estas actividades como castigo o mérito negativo; o hablar de ellas con pereza y desánimo, porque entonces así lo van a percibir.
Sugerencias para Adecuar en casa
- A temprana edad, establecer zonas asociadas con juegos y desarrollo creativo. Dar nombres lúdicos.
- Cuando ya lo empieces a incluir en actividades del hogar, adecúa estanterías a su alcance y facilidad.
- Identifica de forma visual con imágenes, el contenido de cada estante, gaveta, cesta, o contenedor de sus zonas de alcance: juguetes, ropa, artículos escolares.
- Toma en cuenta sus gustos e intereses a la hora de decorar.
- Sé enfática a la hora de retornar cualquier objeto a su puesto una vez usado.
- Establece un organizador semanal o planificador para ellos: llénalo de muchos stickers y colores de su preferencia.
- Incluyelo en actividades de remodelación o reestructuración de organización en casa.
- Si dispones del tiempo, practica DIY para organizar objetos con ellos.
- Establece horarios o zonas de dedicación a la lectura.
- Define espacios propios y en común, dentro de casa.
Queremos a agradecer a Antonietta de @orderstanding por realizar este artículo para nuestro blog y darnos éstas herramientas para que nuestros niños aprendan a ser más ordenados.
Muy buen blog
Excelente para nuestro núcleo familiar, ya que como abuela y maestra jubilada permite invertir tiempo en aprender jugando con mis nietos